La desensibilización sistemática es un tipo de terapia cognitiva-conductual basado en el principio de condicionamiento clásico y modificación de la conducta. Fue desarrollado por Wolpe durante la década de 1950. Esta terapia tiene como objetivo eliminar la respuesta de miedo de una fobia y reemplazar gradualmente una respuesta de relajación al estímulo condicional mediante él contra condicionamiento.
En este artículo te comentamos que es la desensibilización sistemática, formas de tratamiento, etapas, ejemplos y mucho más.
¿Qué es la desensibilización sistemática?
La desensibilización sistemática es un enfoque terapéutico basado en la evidencia que combina técnicas de relajación con una exposición gradual para ayudar a superar lentamente una fobia. Esta intervención propone entrenar a los pacientes para que puedan regular sus emociones cuando son expuestos a un estímulo fóbico.
La desensibilización sistemática es un método de tratamiento que aumenta la sensación de autocontrol; es decir, el terapeuta sugiere, guía o ayuda, pero no representa el núcleo del tratamiento. Por lo tanto, en esta técnica se minimiza el riesgo de dependencia del terapeuta o de percibir las mejoras como externas al paciente.
¿Qué se le enseña al paciente?
En resumen podríamos decir que al paciente se le enseñan técnicas de regulación emocional. Esto genera que el paciente aprenda nuevas formas de reaccionar o responder ante un estímulo fóbico u ansiógeno.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
El número de sesiones necesarias depende de la gravedad de la fobia. Generalmente de 4 a 6 sesiones, hasta 12 para fobia severa. La terapia se completa cuando se logran los objetivos terapéuticos acordados (no necesariamente cuando los temores de la persona se han eliminado por completo).
¿Qué tipo de exposiciones existen?
La exposición se puede realizar de tres formas:
- In vitro – el cliente imagina la exposición al estímulo fóbico.
- En vivo – el cliente está realmente expuesto al estímulo fóbico.
- Realidad Virtual – el cliente se expone al estímulo fóbico en un entorno virtual.
¿Cómo se aplica la desensibilización sistemática?
La desensibilización sistémica consta de tres etapas:
1. Aprender técnicas de relajación
Primero, el paciente aprende técnicas de relajación profunda y ejercicios de respiración. Por ejemplo, control de la respiración, respiración diafragmática, técnica de relajación muscular progresiva de Jacobson, mindfulness u otras técnicas de regulación emocional.
Este paso es importante, ya que intentamos crear lo que llamamos una inhibición recíproca, donde se aprende una respuesta que inhibe a la otra. En caso de las fobias, se le enseña al paciente a relajarse cuando la respuesta natural del miedo es tensionarse.
2. Generar una lista de miedos
En segundo lugar, el paciente crea una lista de sus miedos y comienza a darle jerarquía. De los estímulos que menos ansiedad generan a los que más miedo producen. La lista es crucial, ya que proporciona un marco para la terapia.
El ir «tachando» elemento de la lista genera más adherencia al tratamiento, ya que nos permite visualizar el avance del mismo.
3. Comienza la exposición
El tratamiento comienza por los estímulos menos desagradables, practicando técnicas de relajación y cuando se está cómodo con el estímulo, se avanza a la siguiente etapa. De esta manera se va aumentando por etapas, hasta llegar a las imágenes o situaciones que más ansiedad provocan.
Ejemplo de un caso
En el caso de la Talasofobia, que es el miedo al mar, se puede exponer al paciente a los siguientes etapas:
- Ver una foto del mar a 5 metros
- Acercar la foto a 2 metros
- Luego manipular la foto
- Después, podemos pedirle que imagine el mar, pero sin introducirse.
- En esta etapa le podemos pediremos que se imagine dentro del mar
- Con los lentes de Realidad Virtual, podemos llevarlo virtualmente a una playa, subirlo a un barco, etc.
- Utilizando las gafas podemos hasta sumergirlo en el mar.
- Por último, si tenemos la posibilidad podemos ir al mar con nuestro paciente.
Todo este proceso puede llevar hasta 12 sesiones aproximadamente. Cabe aclarar que podemos retroceder en etapas, cuando el paciente no puede avanzar o tiene un retroceso de sesión a sesión, en otras palabras no es necesario el avance lineal.
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¿Puedo intentarlo solo?
Si es posible intentar la desensibilización sistemática por cuenta propia, pero recuerde que la exposición debe ser lenta y gradual.
Si la exposición de bajo nivel lo hace sentir ansioso, siga practicando las técnicas de relajación y trabajando el miedo.
No hay un ritmo adecuado para pasar de etapa. Puede pasar meses en una misma etapa y pasar 3 etapas en una misma semana.
Tómate todo el tiempo que necesites. Si te mueves demasiado rápido, puedes pasar por una incomodidad innecesaria y pensar que no puedes lograrlo
Si desea probar este método por su cuenta, los siguientes consejos pueden ayudarle:
- Familiarícese con las técnicas de relajación. Si ya se siente tenso y ansioso, pensar en relajarse puede ser más difícil, por lo que es importante aprender estas técnicas primero.
- Has la lista con al mayor cantidad de etapas posible.
- Practica exponiéndote a tu miedo todos los días, aunque sea unos minutos.
- Recuerde detenerse y hacer un ejercicio de relajación cuando te sienta ansioso. El objetivo es reemplazar la sensación de ansiedad por un estado de relajación. Puede que tengas que intentar cada paso varias veces, y eso está bien.
- Intente continuar el ejercicio de exposición hasta que sienta la mitad del miedo o la ansiedad que normalmente sentiría. Esto puede ser difícil de medir, pero es probable que pueda seguirlo mejor a medida que se familiarice con la exposición.
- Si no está seguro de intentar una desensibilización sistemática por su cuenta, un psicólogo especializado puede responder a cualquier pregunta que tengas.
- La sensibilización no es 100% efectiva, existen otros métodos para poder trabajar tus miedos.
Si intento realizar la desensibilización usted solo y no puede conseguir resultado o realizo otros tratamientos psicológicos en
Problemas teóricos
La desensibilización sistemática es muy eficaz cuando el problema es una ansiedad aprendida de objetos / situaciones específicos, por ejemplo, fobias. Sin embargo, la desensibilización sistemática no es eficaz en el tratamiento de trastornos mentales graves, como la depresión y la esquizofrenia.
Otro problema es que trata los síntomas, no las causas. La desensibilización sistemática trata solo los síntomas observables y medibles de una fobia. Esta es una debilidad significativa porque las cogniciones y las emociones son a menudo los impulsores del comportamiento.
Según algunos estudios, las fobias sociales y la agorafobia no parecen mostrar mucha mejoría con este tipo de terapia.
Por ejemplo, si el miedo a hablar en público se debe a unas habilidades sociales deficientes, es más probable que se produzca una reducción de la fobia en un tratamiento que incluye el aprendizaje de habilidades sociales eficaces que la desensibilización sistemática por sí sola.